Ir en bici al colegio es más que un medio de transporte: es una forma divertida y eficaz de mejorar el día a día. Cambiar el coche por la bici os proporcionará a ti y a tus hijos cuerpos más sanos, mentes más despiertas y recuerdos más entrañables de sus días escolares.

Convierte el camino al colegio en una divertida aventura sobre ruedas

Beneficios de la bicicleta para la salud

Uno de los mayores beneficios de ir al colegio en bicicleta es su efecto sobre la salud física. Además, ahorras tiempo, ya que haces ejercicio a la vez que realizas un recorrido que tendrías que hacer de todos modos. La distancia al colegio no tiene por qué suponer un obstáculo. Con la ayuda de una e-bike, puedes ir más lejos y más rápido que con una bicicleta convencional, lo que convierte a las e-bikes en una alternativa realista a los coches para trayectos algo más largos.

De acuerdo con el British Journal of Sports Medicine, los niños que van al colegio en bicicleta tienen una mejor condición cardiorrespiratoria que los que no lo hacen. Esta ventaja se traduce en un menor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares en etapas posteriores de la vida.

Es probable, naturalmente, que los niños más pequeños no puedan llegar a la escuela pedaleando, pero con la ayuda de una bicicleta de carga o de un asiento para bicicletas, podrás llevarlos en tu bicicleta de forma segura. Tu hijo se beneficiará del aire limpio, de estar al aire libre y de establecer un hábito de ejercicio en exteriores que le permitirá estar preparado para desplazarse sobre sus propias dos ruedas.

Las bicicletas estimulan el cerebro

¡Las ventajas educativas de ir al colegio en bicicleta son sorprendentes!

Un resumen de evidencias de investigación sugiere que aumentar la actividad física y la forma física puede mejorar el rendimiento académico y que las matemáticas y la lectura son las áreas académicas en las que más influye la actividad física. Las sesiones de ejercicio único y la práctica habitual de deportes pueden mejorar el rendimiento cognitivo y la salud cerebral.

Un estudio realizado en Dinamarca reveló que los niños que iban a pie o en bicicleta al colegio, en lugar de en coche o transporte público, rendían mucho mejor en tareas que requerían concentración, como resolver puzzles, y que los efectos duraban hasta cuatro horas después de llegar al colegio.

Convierte el camino al colegio en una divertida aventura sobre ruedas

Pedalear para mejorar la salud mental

Los beneficios de la bicicleta van más allá de lo físico. Puede ser un factor que contribuya notablemente a alcanzar un estado de bienestar mental para personas de todas las edades. Mientras pedaleas, observas tu entorno con mayor atención, conectas mejor con la naturaleza y el flujo rítmico del pedaleo puede ayudarte a alcanzar un estado casi meditativo.

Si las mañanas de colegio son causa de conflictos, puede que montar juntos en bicicleta os ayude a solucionarlos. Durante el trayecto en bici al colegio, los padres afirman que pueden charlar sobre el día que les espera y hablar relajadamente de cualquier preocupación que pueda tener su hijo.

Tres padres comparten su trayecto al colegio.

Ir a la escuela en bicicleta en Jönköping, Suecia

Chris Lanaway es fotógrafo profesional y padre de dos hijos. 

"Aquí, en Suecia, se favorece totalmente el uso de la bicicleta. Nos resulta fácil dejar a nuestros hijos en el colegio. La infraestructura cercana a la escuela está diseñada para que ir a pie o en bicicleta sea más fácil y seguro. En los alrededores de la escuela el límite de velocidad es de 20 km/h y hay grandes señales que dicen que apagues el motor para reducir las emisiones de humo".

"Tenemos un remolque con dos asientos; mis hijos montan bien en bicicleta, pero la cuesta que hay justo delante de nuestra puerta es muy pronunciada, así que es demasiado para los niños más pequeños. A los niños les encanta. Les encantan las bajadas después de las subidas que hay en la carretera secundaria, puedes ir rápido, es como una montaña rusa para ellos. Es muy divertido oír cómo se ríen.

"En invierno, cuando dejo a los niños y cuando los recojo es de noche, pero las luces de buena calidad no son caras y puedes llevar una chaqueta de alta visibilidad para que la gente te vea. Hay algunos días de primavera en que está demasiado helado para ir en bici. Esos días vamos andando, pero la mayoría de los días vamos en bicicleta".

Ir a la escuela en bicicleta en Londres, Inglaterra

La Dra. Josephine Perry es psicóloga colegiada y tiene una hija.

"Como madre, me encanta que nos desplacemos en bici. Me encanta oír lo orgullosa que está mi hija cuando cuenta a sus amigos que ha hecho todo el camino sola y lo emocionada que se pone cuando aprende nuevas habilidades con la bicicleta que le ha costado dominar.

" Saber que has llegado a alguna parte sin ayuda de nadie puede dar mucha confianza, ¡sobre todo cuando sólo tienes 6 años! A mi hija le da una sensación de logro incluso antes de que se abra la puerta del colegio. Creo que el viaje de vuelta a casa es una gran oportunidad para ir juntas y charlar sobre el día de una forma muy relajada: cuando le pregunto qué ha aprendido ese día, ya no me dice "no me acuerdo".

"Como psicóloga del ejercicio, sé que practicar ejercicio antes de aprender nos ayuda a desarrollar mejores capacidades cognitivas, aporta creatividad y nos permite concentrarnos mejor. Esto significa que sé que mi hija empieza cada jornada escolar de la mejor manera posible y que llega preparada para aprender".

Ir a la escuela en bicicleta en Lille, Francia

Xavier es director de marketing y padre de tres hijos

"Mi día empieza pidiendo a mis hijos que se suban a mi bicicleta eléctrica de carga. A las 8.10 salgo para dejar a mi hijo en el colegio, un agradable paseo de 1,2 km por el canal donde podemos ver las barcazas. Mi siguiente parada es la escuela de mi hija, a otro kilómetro en la ciudad. Después, me voy a la oficina.

"A menudo paro a tomar un café para revisar mis correos electrónicos o enviar algunos mensajes antes de ir a trabajar. He cambiado el coche por la bicicleta eléctrica. Es menos estresante, ya que siempre tardas lo mismo en hacer el trayecto. Se acabaron los atascos y el tiempo perdido buscando aparcamiento. A mis hijos les encanta. Cada trayecto al colegio es un momento de diversión para ellos. Se llenan de orgullo cuando llegamos en la bici, ¡creo que les gusta que sus amigos sientan envidia de cómo van al colegio!"

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