Descubre las siete cosas que influyen en la frecuencia con la que tu bicicleta necesita mantenimiento y aprende a cuidar de ella, asegurándote de alargar el intervalo entre visitas al taller, realizando su mantenimiento en casa.
Las revisiones periódicas por parte de un mecánico profesional ayudan a que tu bicicleta funcione de forma eficiente y segura, pero puedes limitar el número de veces que necesita una revisión realizando un sencillo mantenimiento en casa. El cuidado de tu bicicleta es relativamente sencillo y debe formar parte de tu rutina de utilización. Estos factores pueden determinar la frecuencia con que necesitará una revisión. Existen algunas cosas prácticas que puedes hacer para mantener tu bicicleta en buen estado entre las visitas a la tienda de bicicletas.
1. CON QUÉ FRECUENCIA UTILIZAS LA BICICLETA
Cuanto más montes, más rápido se desgastarán los componentes y más a menudo tendrás que revisar tu bicicleta. Naturalmente, los consumibles como los neumáticos, las cadenas y los casetes se desgastan con el uso frecuente, pero un buen mantenimiento en casa, que incluya una limpieza frecuente y un almacenamiento adecuado, puede ayudar a prolongar su vida útil.
¿Sabías que...?
Lo ideal es sustituir el casete una vez por cada 3-5 sustituciones de cadena.
Consejo práctico
Lava la bicicleta con regularidad, utilizando un desengrasante para eliminar la arenilla y la suciedad de la cadena, el cassete y el plato. Esto ayudará a que tu transmisión funcione con suavidad y reducirá su desgaste.
2. POR DÓNDE UTILIZAS LA BICICLETA
Los diferentes lugares presentan diferentes condiciones y desafíos para tu bicicleta de diferentes formas. Los caminos húmedos, arenosos y sucios pueden crear una pasta abrasiva alrededor de tu transmisión, mientras que las zonas montañosas someten a más tensión a la cadena y los frenos con las exigencias adicionales de subir y bajar.
¿Sabías que...?
Cuando las zapatas de los frenos de llanta estén desgastadas más allá de las ranuras, es necesario cambiarlas. Las pastillas de los frenos de disco deben sustituirse cuando tengan menos de 0,5 mm.
Consejo práctico
El uso de un lubricante para cadenas para climas húmedos puede reducir el desgaste de la transmisión gracias a la capacidad química del lubricante para cadenas de repeler el agua, lo que mejora la protección de la cadena y los componentes.
3. TU CUERPO
Los ciclistas más pesados o potentes tienden a forzar más sus bicicletas. Sus frenos tienen que trabajar más para detenerlos y se ejerce más fuerza sobre los componentes, incluyendo las ruedas y el cuadro de la bicicleta. El esfuerzo adicional que los ciclistas pesados y potentes ejerzan sobre sus bicicletas dependerá de su estilo de conducción.
¿Sabías que...?
Si eres un ciclista más potente, es importante que prestes atención al estado de tus componentes. Utiliza un testigo de desgaste de la cadena para determinar si es necesario cambiarla.
Consejo práctico
Concéntrate en cambiar con suavidad. No cambies de marcha bajo presión, sino reduciendo la potencia que ejerces sobre los pedales mientras la cadena pasa de un cambio a otro.
4. TU ESTILO DE CONDUCCIÓN
En carretera o fuera de ella, el estilo de conducción importa. En carretera, cambiar de marcha bajo carga y frenar tarde pueden desgastar las piezas mucho más rápidamente que pedalear suavemente y realizar el cambio de marchas de forma intuitiva. De manera similar, los ciclistas de montaña que se esfuerzan por salvar obstáculos o golpean las ruedas contra rocas y raíces sufrirán un desgaste más rápido que los ciclistas más fluidos.
¿Sabías que...?
Los discos de freno deben sustituirse cuando tengan menos de 1,5 mm de grosor o empiece a apreciarse el aluminio.
Consejo práctico
Anticiparte a los cambios de pendiente o a los obstáculos que te esperan te permitirá cambiar a la marcha adecuada o empezar a frenar, de forma que estarás en la marcha correcta para conquistar un repecho o no necesitarás bloquear los frenos para detenerte de repente.
5. E-BIKE FRENTE A BICICLETA CONVENCIONAL
Las bicicletas eléctricas suelen necesitar componentes nuevos más a menudo que las bicicletas sin asistencia, ya que suelen ser más rápidas y pesadas. El par del motor sobrecarga la transmisión, y una bicicleta más rápida y pesada necesita más potencia de frenado para detenerse con rapidez y suavidad.
¿Sabías que...?
En una bicicleta eléctrica, todos los componentes están sometidos a una mayor tensión. Sustituye los cables cuando aumente la fricción o si están dañados o deshilachados.
Consejo práctico
No confíes demasiado en el motor de la e-bike para impulsarte en las subidas u obstáculos, más bien cambia de marcha como lo harías en una bicicleta convencional y pedalea para reducir el esfuerzo de la transmisión.
6. LO BIEN QUE LIMPIAS TU BICICLETA
El polvo, la humedad y la suciedad afectan a todos los componentes de tu bicicleta, desgastando las piezas móviles e impidiendo un cambio, un frenado y un pedaleo suaves. Para limitar el desgaste y mejorar el funcionamiento de tu bicicleta, hazle una limpieza rápida después de cada uso y lubrícala con el aceite recomendado por tu mecánico SHIMANO.
¿Sabías que...?
Recomendamos utilizar lubricantes y productos de mantenimiento SHIMANO para obtener un rendimiento continuado y una mayor durabilidad.
Consejo práctico
Utilizar un limpiador de cadenas, que emplea desengrasante y desliza una serie de cepillos y cerdas alrededor de la cadena, te ayudará a eliminar más eficazmente el lubricante viejo, la suciedad y la arenilla de la cadena.
7. DÓNDE GUARDAS TU BICICLETA
Procura mantener la bicicleta seca utilizando una funda si la dejas al aire libre, ya que la lluvia y la humedad pueden oxidarla. Si tienes una e-bike, guárdala en algún lugar con una temperatura constante y templada, ya que los ambientes muy fríos o muy cálidos pueden afectar al rendimiento y la vida útil de la batería.
¿Sabías que...?
Prevenir es siempre mejor que curar. Si no puedes guardar la bicicleta en un lugar cerrado, procura comprobar periódicamente el desgaste de las piezas y lubricar regularmente las partes móviles.
Consejo práctico
Existen varias soluciones para guardar bicicletas que te permiten colgarlas en la pared o elevarlas hasta el techo y así reducir al mínimo el espacio que ocupan en tu casa o garaje.
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